Cualquiera puede hacer un curso online. Pero no todos saben cómo hacer un buen curso online, que resulte atractivo para su audiencia.
El punto de partida debe ser contenido ameno, bien redactado, útil y práctico. Olvídate de la teoría aburrida y extensa e intenta plasmar teoría digerible.
Además de esto, te contamos algunos consejos más para que sepas cómo hacer el mejor curso.
Contenidos
Analiza a tu competencia y desmárcate
Seguramente no seas el primero que va a vender un curso online de esa temática para ese sector.
Y eso también lo va a saber tu potencial cliente.
Incluso es posible que ya haya realizado la formación de tu competencia.
Por eso, tú mejor que nadie debe conocer de cerca qué están haciendo los otros figurantes del mercado para poder plantear un curso diferente, innovador.
Ni tan rompedor que esté demasiado alejado a lo que ya se ofrece, ni tan parecido que suene a “otro curso más”.
Se trata de dar con la dosis justa de diferencia.
A veces basta con plantear el temario desde una perspectiva distinta. Otras, con contarlo con un tono diferente. O probar a trabajarlo todo desde las dinámicas que se hagan en directo.
Primero recopila información sobre lo que ya hay en el mercado y, luego… Dale una vuelta.
Cuida el diseño de todo lo que hagas
El buen diseño denota profesionalidad. Calidad.
Y hace que consumamos los contenidos de una manera diferente, apreciando mucho más cada palabra plasmada.
Por ello, procura que todo lo que hagas guarde coherencia estética: la propia escuela, los archivos PDF que generes, las plantillas de excel que compartas, diapositivas, vídeos, charlas…
Y si tú no sabes cómo hacerlo busca al profesional adecuado que te ayude a darle forma a todo el material gráfico de tu formación para que vaya en sintonía.
Un mal diseño puede arruinar no sólo tus ventas, sino también la retención de tus alumnos.
Trabájalo en tu propia plataforma
En un post anterior ya contamos por qué merece la pena tener una escuela online propia, por lo que te animamos a que te pases por allí si quieres profundizar en el tema.
Aquí, por resumir mucho, diremos que trabajar con tu escuela te permitirá no solo adaptar la plataforma a tu identidad corporativa por completo, sino que podrás escalarla en funcionalidades tanto como necesites.
Cuida mucho el onboarding
¿Qué sucede tras la compra?
Es la primera impresión que va a formarse tu alumno con respecto a tu formación. No la descuides.
Cuanto más sencillo sea el acceder al contenido que acaba de comprar, mucho mejor.
Y si eso lo acompañas de un mensaje personalizado ya es para nota.
Si cuentas con el tiempo suficiente y el número de alumnos es limitado, si le envías un vídeo personalizado de bienvenida los dejarás de piedra.
Planifica las dinámicas de grupo
Un curso online no debe quedarse únicamente en la parte teórica.
Necesitas que tus alumnos se impliquen realmente en la formación, que logren superar la barrera de la “pantalla” y se esfuercen al máximo.
De ese modo vivirán una experiencia enriquecedora y disfrutarán la formación, que dejará de ser un mero curso para ser algo más.
Piensa qué clase de actividades puedes implementar, qué acciones puedes pedirles que hagan y no te limites a pensar en ejercicios escritos: aprovecha la magia de los directos, de los chats, de las fotografías, de los vídeos que puedan enviar… ¡Imaginación al poder!
Fomenta la conexión entre alumnos
Cuanto más a gusto se sientan tus alumnos, mejor sabor de boca dejará en ellos la formación y mayor será su aprendizaje.
¿Y esto cómo puede lograrse?
En relación con el punto anterior, plantea actividades que impliquen la interacción entre ellos. Que tengan que conocerse, que puedan y deban opinar para ayudar a sus compañeros, que se propongan unos a otros ideas de mejora.
Herramientas útiles para esto son sin duda las charlas en directo tras las clases o los chats ajenos a la plataforma educativa, que pueden estar en un chat de Telegram o en un grupo privado de Facebook. Incluso un canal de Slack o de Discord.
El punto de partida sin lugar a dudas es el pedirle que se presenten, uno a uno. De ese modo todos (alumnos y profesores) os conoceréis mejor.
Gamifica para incentivar
El sistema de recompensas funciona realmente bien. Haz uso de la gamificación para premiar mediante puntos y medallas cada interacción que realicen tus alumnos.
Y no sólo eso: muestra un tablero a todos en el que salgan los 5 alumnos (por ejemplo) con mayor puntuación.
También puedes organizar premios mensuales (o semanales, según como sea tu formación) para los 3 primeros de la lista. Que sean lo suficientemente atractivos como para que quieran esforzarse más.
Acompaña en todo momento
La formación digital puede llegar a ser muy solitaria, por lo que debes intentar evitar esto en todo momento. Haz que tus alumnos sientan que realmente estás al otro lado, sea cual sea su problema u obstáculo.
Esto se consigue con:
- Los directos que ya hemos mencionado y que deberías de realizar de forma periódica.
- La presencia en los chats que hayas creado.
- Notificaciones automáticas cuando un nuevo contenido está disponible, o cuando finaliza el curso.
- Emails periódicos en los que le preguntes si tiene alguna dificultad.
Debes encontrar el punto de equilibrio para no saturarlos de comunicaciones pero tampoco dejarlos “solos”.
Busca apoyo al primer síntoma
Llevar (bien) una formación online puede llegar a ser una tarea tan intensa como te propongas. Por eso es importante que tan pronto empieces a notar que la carga de tareas del día a día te supera, busques colaboradores para que te ayuden a llevarlo.
Si has planteado bien tus números deberías de poder delegar ciertas tareas.
Un ejemplo claro sería el poder derivar el soporte y el mantenimiento técnico de tu escuela a profesionales que no sólo sepan resolver cualquier problema que te pueda surgir sin que tú tengas que perder tu valioso tiempo, sino que también tengan los conocimientos suficientes como para poder darte ideas de mejora para tu plataforma.
A nosotros ya nos conoces 🙂
También es posible que según el volumen de alumnos que tengas y las actividades que organices necesites que alguien más te eche una mano. No esperes a que te llegue el agua al cuello para empezar a buscar candidatos, ya que el proceso de selección es fundamental para que tu proyecto vaya bien.
Y hasta aquí los consejos para hacer que tu formación digital sea atractiva. Y tú, ¿qué opinas? ¿Añadirías algún consejo más?